lunes, 29 de enero de 2007

Auuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuu!

En lo más profundo de la noche, mientras la penumbra cubre toda la ciudad, un aullido desgarrador estremece a propios y extraños, un aullido que nos pone la piel de gallina y nos hace temblar hasta la última fibra del cuerpo...